Vecino de Móstoles enfrenta más de 13 años de cárcel por incendiar casa de vecinos.

Equipos de emergencia en el incendio de Móstoles, en 2023

Un residente de Móstoles se enfrenta a más de 13 años de prisión por incendiar la casa de sus vecinos debido a las molestias por el ruido que generaban, causando varios heridos por inhalación de humo, incluyendo al matrimonio y a los dos hijos menores que vivían en la vivienda.

La Audiencia Provincial de Madrid ha programado el juicio para este martes 22, en el que se acusa a este hombre de 59 años de un delito de incendio con peligro para la vida o integridad física de las personas, así como de otros siete delitos leves de lesiones por el incendio provocado en junio de 2023.

La Fiscalía ha pedido 13 años y dos meses de prisión para este individuo, que sufría un deterioro cognitivo leve posiblemente relacionado con un diagnóstico previo de leucoencefalopatía multifocal progresiva, que puede afectar las capacidades de la persona según su grado de deterioro.

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Los hechos tuvieron lugar el 17 de junio de 2023 por la noche, cuando el acusado visitó una estación de servicio en Móstoles, donde compró una garrafa de gasolina y se dirigió al edificio donde vivía para incendiar la casa de sus vecinos que vivían en un piso inferior.

Roció la puerta y el felpudo de la vivienda y prendió fuego «con total desprecio por la integridad física de los residentes del edificio, así como de los demás vecinos del tercer piso».

Según el escrito de acusación al que tuvo acceso EFE, el acusado pretendía protestar por las molestias o ruidos que provenían de sus vecinos del piso superior, por los cuales ya se había quejado en ocasiones anteriores.

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Dentro de la vivienda se encontraba un matrimonio con sus dos hijos de cinco años y diez meses, respectivamente, y como resultado de esta acción, se desencadenó un incendio frente al piso 3ºA, que requirió la intervención de dos equipos de bomberos, agentes de la Policía Local de Móstoles y de la Policía Nacional.

El fuego fue extinguido antes de que los bomberos llegaran al tercer piso y antes de que la vivienda se incendiara, ya que no se propagó más allá de la puerta del 3ºA, pero generó una gran cantidad de humo que causó lesiones por inhalación a los residentes y a los agentes de la Policía Local.

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